El problema

El sistema de inmigración de Estados Unidos está fundamentalmente roto, especialmente para las comunidades hispanas. Años de inacción en el Congreso han permitido que millones de personas sigan siendo indocumentadas, viviendo con miedo e incertidumbre. Esto es inmoral y exige reformas.

Los hispanos representan más del 10% de la población de Maryland. . . . Según la Dra. Gabriela Lemus, en 10 de 21 condados, los estudiantes latinos representan más del 10% del cuerpo estudiantil. En tres de estos condados, es el 20% o más. Y en Prince George ‘s, es casi el 40% según datos de 2018. Como orgulloso hijo de inmigrantes cubanos, entiendo las luchas que enfrentan los residentes hispanos. Nuestras leyes obsoletas no reflejan la diversidad de Maryland ni los ideales de inclusión fundacionales de Estados Unidos.

Desde deportaciones que destrozan familias hasta la explotación de trabajadores indocumentados, las políticas actuales reducen nuestros valores. Necesitamos una reforma integral centrada en la humanidad, la compasión y la igualdad de oportunidades.

Un sistema que obliga a millones de personas a vivir en las sombras reduce la seguridad pública y pone a prueba los servicios sociales. Sacar a los residentes indocumentados de las sombras a través de un estatus legal ayuda a integrar a las familias inmigrantes en el tejido de nuestras comunidades.

Tampoco podemos ignorar que las políticas exteriores y la intervención de Estados Unidos en América Latina en el pasado han alimentado gran parte la inestabilidad y la violencia que impulsan la inmigración a Estados Unidos. Debemos reconocer esta compleja historia.

Cómo resolveremos el problema juntos

Como su Senador, lucharé por una reforma migratoria inclusiva y justa.Esto significa:

  • Un camino hacia la ciudadanía para 11 millones de inmigrantes indocumentados, incluidos más de 636.000 en Maryland.
  • Protecciones permanentes para los “Dreamers” que no conocen otro hogar que Estados Unidos.
  • Salvaguardar los derechos humanos y la unidad familiar poniendo fin a la detención/deportación de inmigrantes no violentos.
  • Proteger a los trabajadores y procesar a los empleadores que explotan la mano de obra indocumentada.
  • Dar la bienvenida a refugiados y solicitantes de asilo de manera consistente con las obligaciones legales de Estados Unidos.
  • Agilizar nuestro sistema burocrático de inmigración legal para promover la naturalización.

Mi política de inmigración se guiará por las palabras inscritas en la Estatua de la Libertad: “Dame a vuestras masas cansadas, pobres y apiñadas que anhelan respirar libres”. Estados Unidos debe seguir siendo un faro de esperanza y oportunidades para la gente de todo el mundo.

También aumentaré las mejoras de personal, tecnología y eficiencia para eliminar atrasos y demoras dentro del sistema de inmigración, al tiempo que mejoraré la integridad. Las reformas inteligentes equilibrarán la compasión y el Estado de derecho.

Para procesar los retrasos antes de dar la bienvenida a inmigrantes adicionales, podríamos considerar limitar la inmigración anual a 500.000 por año de forma temporal. Sin embargo, este límite debe reevaluarse anualmente en función del progreso del trabajo pendiente para garantizar que no sea innecesariamente restrictivo.

Mi prioridad será eliminar eficientemente el actual retraso en las solicitudes mediante la financiación de más jueces y personal de inmigración. Con recursos disponibles para un procesamiento oportuno, los niveles de inmigración pueden volver a aumentar de manera responsable. Estados Unidos siempre ha encontrado fuerza en la diversidad.

Cómo avanzaremos el tema en Washington, DC y Maryland

En el Congreso, patrocinaré una reforma legislativa integral alineada con los principios mencionados anteriormente. La diversidad de Estados Unidos es nuestra fortaleza.

Construiré coaliciones entre legisladores para implementar soluciones bipartidistas y duraderas. No podemos permitir que las divisiones partidistas obstruyan el progreso por más tiempo.

En Maryland, alzaré las voces de nuestras vibrantes comunidades hispanas. Mi oficina también ayudará a los residentes elegibles a completar el proceso de naturalización para convertirse en ciudadanos estadounidenses.

Y me comprometo a escuchar a las familias inmigrantes sobre los impactos en la vida real de las políticas fallidas. Sus experiencias informarán nuestra marcha hacia el progreso.

Los beneficios para Estados Unidos y Maryland

Una reforma migratoria justa y compasiva fortalecerá a las comunidades, impulsará nuestra economía y reafirmará nuestra diversa identidad nacional. Los inmigrantes trabajadores siempre han hecho a Estados Unidos más grande.

Al adoptar soluciones audaces e inclusivas, podemos crear un país más justo que cumpla su promesa fundacional de ser una tierra de libertad y oportunidades para todos. El progreso es posible si redescubrimos los valores compartidos de humanidad, empatía y esperanza. Seré ese campeón en el Senado.

Los inmigrantes aportan vitalidad, cultura e innovación a la vida estadounidense. Sus sueños y contribuciones hacen que nuestro estado y nuestra nación prosperen. Ha llegado el momento de promulgar reformas que empoderen a nuestros vecinos inmigrantes para participar plenamente y liberar su potencial.